Bienestar mental en la adolescencia
Por Gabriela Orihuela
El 2 de marzo se celebra el Día Mundial del Bienestar Menta para Adolescentes. La finalidad de esta fecha es sensibilizar a la población acerca de los problemas de salud mental que afrontan las juventuds.
La depresión, la ansiedad y los trastornos del comportamiento se encuentran entre las principales causas de enfermedad y discapacidad en adolescentes.
La pandemia de Covid19 , junto a otros factores como el acoso escolar y el bullying, han sido detonantes del incremento de los problemas de salud mental en la población más joven. Es de vital la importancia diseñar y aplicar estrategias de apoyo de salud mental dirigidas a las adolescencias, mediante la aplicación de diversos recursos que beneficien su bienestar psicológico y que impacten de manera positiva en sus vidas, a través del aprendizaje socio-emocional.
Sobre este tema, la licenciada en Psicología, Ailen Vera Delgado comentó para Muchacha que «desde la Psicología llamamos salud mental a nuestro bienestar emocional, psicológico y social. Implica la forma en la que pensamos, sentimos y actuamos ante la vida. La salud mental ayuda a manejar situaciones como el estrés, la toma de decisiones o los vínculos que establecemos con otras personas».
¿Podemos hablar de salud sin incluir a la salud mental?
No. Una mente saludable hace que el cuerpo funcione de manera correcta y genere bienestar emocional para evitar ciertas enfermedades o para asumirlas y trabajar en función de mejorarlas. Sin salud mental no existe una salud adecuada.
¿Por qué es importante hablar de salud mental?
Es importante hablar de salud mental porque es un estado de bienestar del cual la persona es consciente, la hace sentir a gusto con sus propias capacidades mentales y físicas. Cuando existe una salud mental adecuada aumenta la productividad, se mejoran las relaciones sociales, la salud física y se mantienen actitudes positivas las cuales permiten decidir mejor. De hecho, que una persona tenga una actitud negativa y sea constantemente pesimista, es tomado por los psicólogos como un indicador de diversos trastornos de salud mental.
¿Es frágil la salud mental en los y las adolescentes? ¿Por qué?
Sí, la adolescencia es un período crucial para el desarrollo de las emociones y hábitos sociales importantes para el bienestar mental, además, tanto el cuerpo como el psiquismo están en un proceso de transformación, lo que hace que sean más frágiles. Es necesario contar con un entorno favorable y de protección en la familia, la escuela y la comunidad en general. Cuántos más sean los factores de riesgo a los que están expuestos las y los adolescentes, mayores serán los efectos que puedan tener para su salud mental.
¿Qué hechos pueden dañar la salud mental en la adolescencia? ¿Cuáles son los principales?
Hay causas como la discriminación, exclusión, falta de acceso a servicios y apoyo de calidad. Los problemas más frecuentes están asociados a la familia, la escuela, trastornos de alimentación, bullying, el rechazo a su figura corporal, acoso por internet, el consumo de sustancias, depresión o embarazos no deseados, entre otros.
Podemos identificar que nuestra salud mental, o la de otras personas, está dañada cuando dejan de compartir con los demás o se aleja de espacios en los que solía disfrutar. Otros síntomas son los trastornos del sueño, los niveles de energía muy por debajo de lo normal, el consumo de drogas o alcohol, cambios de humor repentinos, bajos rendimientos escolares en el caso de los estudiantes o la incapacidad de resolver situaciones cotidianas sin frustrarse.
Cuando existe un reconocimiento de estos síntomas se debe acudir a un especialista, un proveedor de atención primaria o profesional de la salud mental. La mayor parte de las enfermedades mentales no mejoran por sí solas y, sin tratamiento, pueden empeorar en el tiempo y ocasionar problemas graves.
En nuestro país existe un sistema estructurado a través del área de salud, mediante su médico de familia quién realiza una primera evaluación y remite al paciente hacia la consulta de psicología del policlínico al cual pertenece.
¿Qué ejercicios o buenas prácticas podemos emplear para cuidar nuestra salud mental?
Es importante descansar correctamente, dormir las horas necesarias, hacer ejercicios físicos, comer saludable, tener la mente ocupada en actividades productivas, proyectar pensamientos positivos, mantener siempre la comunicación, relajarse, ponerse objetivos o metas y trabajar en función de ellos.