Mei: la muchacha detrás de los perfiles de Instagram
Por Laura Amelia
La vida ha cambiado, es innegable. Hace unos años, cuando fronteras adentro de esta nación, pocos cubanos sabían lo que era internet y sus utilidades, éramos otras personas.
Entonces, ¿quiénes se preocupaban por la cantidad de seguidores, amigos virtuales o interacciones en una publicación plasmada en un espacio no tangible? ¿quiénes pensaron monetizar a través de las redes sociales digitales? ¿quiénes sabían lo que era ser influencer?
Posiblemente ni Meilin Ayala Garriga era consciente de la trascendencia que esta información podría tener para su vida unos años más tarde. Hoy, es mei_marketingd o yo_soy_meilin para sus seguidores y la multitud de Instagram. La primera, un perfil de emprendimiento dedicado al apoyo e instrucción de interesados en potenciar la red social; la segunda una cuenta con contenido más personal.
Trabaja hace poco tiempo en esto, pero con más de 100 publicaciones entre los dos perfiles supera los tres mil 500 seguidores.
Y no solo crece en su perfil propio, sino que asesora, ayuda a otras personas dedicadas a la creación de contenido para esta plataforma. Sus posts hablan acerca de la motivación, consejos para gestionar bien los perfiles en la red social, hasta vídeos humorísticos.
Sin embargo, ¿cuánto dice este contenido de ella?
Como las apariencias engañan y ser influencer está de moda entre la juventud cubana — y por percepción general, las del género femenino en mayor cantidad-, al equipo de la revista Muchacha se propuso mostrar a la mujer detrás del perfil de Instagram.
Conversar con Meilin es, por supuesto, estar de cara a una miembro de la generación Z — como algunos les llaman a quienes nacieron luego de la expansión masiva de internet en la década de los 90- interesada en emprender, con facilidades de comunicación, una nativa digital en toda regla.
Pero, a la vez, es entablar dialogo con una joven a la que siempre le han gustado las redes sociales, aunque haya comenzado en Instagram solo para compartir fotografías en lugares llamativos, con familiares y amigos. Así hasta que entendió que podían ser además una forma de emprendimiento y, a partir de ese momento comenzó a crear contenido útil.
Gracias a ello, en la actualidad, la influencer — pequeña aún, según ella- e ingeniera civil trabaja en lo que le gusta y ayuda a las personas a aprender sobre las formas de potenciarse a sí mismas y a su negocio en dicha plataforma.
- ¿Cuál es tu plataforma preferida y por qué?
Yo amo a Instagram, es mi red social favorita. Me encantan todos los formatos en los que se puede crear contenido en ella, además de su diseño.
- ¿Fue tu objetivo convertirte en una persona con cierta influencia en esta plataforma digital?
Si, mi intención ha sido ayudar y enseñar a los usuarios acerca de Instagram y, de una forma u otra, que mi opinión y experiencias sean tomadas en cuenta para influir de forma positiva en sus vidas.
- ¿Cuáles son los retos a los que te enfrentas como creadora de contenido en Cuba?
Existen muchos retos a los que me enfrento cada día, pues no dispongo de herramientas y facilidades que me serían de mucha ayuda en este mundo de la creación de contenido.
Lo primero es que no dispongo de WiFi en mi casa. Por lo que, si deseo trabajar desde mi laptop, sería a través de la conexión por datos móviles de mi teléfono celular e Instagram es una red social que consume muchos datos. Casi semanalmente tengo que comprar paquetes de megas para mi teléfono, lo cual es un gasto bastante importante.
Tampoco tengo aro de luz, ni trípode, son equipamientos muy caros. Aunque en algún momento tendré que comprarlos, por el momento uso mi ventilador de pie como trípode y la luz natural para iluminar mis videos.
- ¿Cuán provechoso puede llegar a considerarse ser influencer en nuestro país y dónde están, según tu entender, las problemáticas de serlo?
Al menos para mí, es provechoso en el sentido de que varias marcas, negocios o emprendimientos se interesan en mí por la comunidad que he creado y me ofrecen servicios y productos gratis a cambio de un video publicitario o me pueden contratar para ser la imagen de su marca.
Todo radica en la comunidad que tengas y si al negocio le interesa.
Otro beneficio es que tienes tantas personas que te estiman, quieren y admiran que, si necesitas algo, será más fácil resolver el problema, pues muchas querrán ayudarte de corazón.
Las problemáticas de ser influencer es que estás expuesto(a) al público de manera que ya tu privacidad no será la misma. Aunque eso lo escoge cada persona.
Y otra que veo es la responsabilidad de un influencer sobre lo que comparte, ya que esto incide en una amplia comunidad.
Como casi todos los aspectos de la vida, el hecho de trabajar en las redes sociales apunta a quienes toman esta decisión con un arma de doble filo, la cual pueden empuñar en defensa de causas que así lo merezcan, herir o resultar lacerados.
Tan diversas son las aristas que circundan a la vivencia en el espacio digital que, en pleno siglo XXI, pierden oportunidades quienes reniegan de este entorno por considerarlo del todo tóxico; quienes satanizan la presencia activa en él y aquellas personas que deciden mal obrar con las ventajas que ofrece.
Para buen ejemplo de aprovechamiento de los beneficios que ofrece Instagram: Mei. Ella decidió que su espacio estaría dedicado a transmitir vibras positivas, a motivar a sus seguidores a lograr lo que se propongan mientras le echen ganas y trabajen duro. De la misma forma que solo comparte contenido que haya verificado antes o que haya funcionado según su experiencia.
- ¿Tienes temas vedados? ¿Cuáles son tus favoritos?
Trato de no hablar nada referente a la política, ni a la situación en Cuba, ya que son temas que no deseo transmitir en mi cuenta.
Dentro de los temas que amo tratar están todo lo referente a Instagram, emprendimientos y contenido motivador. A veces me gusta hacer alguno que otro video gracioso, pero no muy seguido.
- En ocasiones, ¿has considerado que te sobreexpones en las redes?
No, porque el contenido que comparto no es tan personal, sino contenido útil para emprendedores. Sí, es verdad que a veces comparto imágenes y videos de mi día a día, pero es lo menos.
- ¿Estar en el espacio digital de una forma tan activa, ¿te ha generado miedos o inseguridades? ¿Cómo lidias tanto con la popularidad como con los haters?
Las inseguridades que me ha creado giran casi siempre alrededor de no ser capaz de seguir, o de crear, contenido atractivo para mi público. Pero después me digo a mí misma que sí puedo con constancia y mentalidad de que siempre debo estar en continuo aprendizaje.
Hasta ahora no he tenido haters como tal. Varias personas que han comentado uno u otro comentario negativo muy aislado y no se repiten nunca. Va y cuando sea más conocida sí tengo.
- ¿Qué consejos les brindas a quienes deciden adentrarse en este mundo en Cuba actualmente?
Les recomiendo que antes de comenzar en este mundo decidan bien qué temas van a tratar, porque es un camino de constancia y si no te gusta tanto lo que haces lo dejarás pronto.
Y que tengan responsabilidad en el contenido que comparten, este debe reflejar sus valores como persona.
Sueñen alto siempre.
Quienes seguimos a Meilin hace un tiempo ya — tanto por los estados de WhatsApp como por Instagram- conocemos que sus logros son frutos de sus esfuerzos, dedicación y mucha perseverancia. Pero sobre todo de disfrutar aquello que hace.
La vida ha cambiado, es innegable. Somos otros; pero no somos peores por saber qué son las redes sociales, ser influencers algunos, o estar influidos por su constante uso otros. Adaptarse al desarrollo es de humanos, emplearlo bien de personas inteligentes.
